El papel de las mujeres en la historia ha sido muy relevante, por mucho que haya quienes quieran promulgar todo lo contrario... el principal problema que han tenido ha sido la falta de reconocimiento público, pero ellas han estado ahí.
Y, para ayudar un poquito más a la divulgación de este papel de la mujer en el mundo, hoy queremos hacer un homenaje a dos mujeres muy importantes en la historia de los viajes y, como no podía ser de otra forma, en el mundo de los road trips... porque...
¿sabías que la primera vez que se usó un vehículo a motor para hacer un viaje largo lo hizo una mujer?
¿sabías que la primera vuelta al mundo en un vehículo la dio una mujer?
¡Casi nada! 😉
Esperamos que este artículo te sirva como inspiración para viajar y lanzarte a la carretera a descubrir el mundo.
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Bertha Benz, el primer viaje en coche de la historia
Bertha Benz: mujeres en la historia de los road trips
En el año 1886, el fabricante de motores alemán, Karl Benz, colocó un motor a un triciclo y lo patentó con el nombre de Bez Patent Motorwagen.
El problema fue que este invento no pasó de ser un mero prototipo, como tantos otros que el fabricante alemán guardaba en su almacén.
Lo que no sabía es que sería su mujer, dos años más tarde, la que cambiaría la suerte de la familia.
Fue el 5 de agosto del año 1888 cuando Bertha Benz, junto a sus dos hijos de 13 y 15 años, dejó una nota a su marido en la que ponía “Vamos a Pforzheim ver a la abuela”, se subieron los tres al Benz Patent Motorwagen y recorrieron el trayecto que une las ciudades alemanas de Mannheim y Pforzheim.
Podemos decir que era la primera vez que una mujer se ponía al volante y, además, la primera vez que se recorría un trayecto largo en un vehículo que no estaba propulsado por caballos.
El trayecto de 106 km no fue nada fácil.
El vehículo sufrió varias averías que tuvieron que resolver con lo que llevaban encima… una horquilla de pelo y una liga fueron indispensables para subsanar algunas de estas.
Como podrás imaginar, no existían las estaciones de servicio, por lo que, para repostar, tuvieron que buscar una farmacia que le vendiese ligroína (que era la mezcla que usaba el vehículo como carburante).
Sin mapas ni GPS, incluso sin carreteras, Bertha Benz se fue orientando como pudo, yendo de un pueblo que le sonaba a otro, y dejando con la boca abierta a todo aquel que la encontraba a su paso.
Después de una dura jornada, envió un telegrama a su marido en el que avisaba de que habían llegado sanos y salvos.
Así que, sin que su marido lo supiese, Bertha Benz hizo historia y, gracias a esta hazaña, consiguió demostrar que este artilugio servía para desplazarse de un lado a otro, destacando así su utilidad.
Posteriormente solo tuvieron que hacer algunos ajustes y, a partir de ahí, el negocio, que estaba a punto de quebrar, floreció hasta el punto de convertirse con los años en uno de los principales fabricantes de automóviles.
Porque no me digas que no, seguro que el apellido de esta pareja (Benz) te suena de algo ¿verdad?
La historia dice que Karl Benz no sabía nada de lo que iba a hacer su mujer, pero la realidad es que el 5 de agosto de 1888, se hizo historia en el mundo de la automoción, una mujer revolucionó las carreteras y, además, llevó a cabo una de las mayores acciones de marketing de la historia.
De hecho, a día de hoy se puede hacer la ruta del primer Road Trip de la historia, con su trayecto de ida y de vuelta (que no fue el mismo).
El nombre de esta ruta es la Bertha Benz Memorial Route y une las ciudades de Mannheim y Pforzheim.
Clärenore Stinnes, la primera vuelta al mundo en coche
Clärenore Stinnes: mujeres en la historia de los road trips
En 1927, Clärenore Stinnes, hija de uno de los hombres más ricos del momento en Alemania, decidió que, tras su carrera íntimamente ligada al mundo del motor (fue pionera en el papel de las mujeres pilotos de carreras), el siguiente paso era dar la vuelta al mundo en un automóvil.
Una aventura nunca antes vista.
Preparó el viaje a conciencia. Llevaba un coche de apoyo con dos mecánicos y muchas provisiones (combustible, comida, recambios, etc.) y, junto a ella, un cámara sueco, Carl-Axel Söderström, que fue el encargado de documentar gráficamente aquella hazaña.
El vehículo elegido en esta ocasión fue un Adler Standard 6.
Por fin, el 25 de mayo de 1927, comenzaron la que sería la primera vuelta al mundo en coche.
Como ella decía cada vez que intentaban persuadirla para volver: “solo viajo hacia el este”.
Se enfrentaron a muchas adversidades, desde averías hasta el frío extremo de Siberia, pasando por el calor infernal del desierto chileno, que los puso realmente entre las cuerdas al quedarse sin agua para beber.
Pero esta aventura también les llevó a vivir grandes momentos.
Fueron recibidos en todo el mundo con los brazos abiertos, incluso llegaron a ser invitados a la Casa Blanca por el presidente Herbert Hoover y visitaron la moderna fábrica de automóviles de Ford, de manos del mismísimo Henry Ford.
Sin duda, una aventura digna de la época, en la que surgieron muchos exploradores y aventureros dispuestos a no detenerse ante nada por conseguir su meta: descubrir el mundo.
El 24 de junio de 1929, unos 47 000 km más tarde, volvieron a Berlín, el punto del que partieron algo más de dos años atrás.
A partir de ahí, Clärenore y Carl-Axel Söderström se casaron y se trasladaron a Suecia, donde vivirían el resto de su vida integrados absolutamente como unos vecinos más.
De nuevo, una mujer es la encargada de romper el hielo en la historia de los road trips.
Clärenore sirvió de inspiración a grandes viajeras, como Heidi Hetzer, conductora alemana de rally, quien en 2014, a sus 77 años, se lanzó a la carretera para hacer el mismo recorrido que Clärenore alrededor del mundo subida a Hudo, su Hudson de 1930.
Como os contábamos al principio, estas mujeres han protagonizado dos momentos cruciales en la historia de los viajes por carretera, pero sin apenas reconocimiento.
Es por eso que queríamos aprovechar esta ocasión para hacerles nuestro pequeño homenaje viajero y dar a conocer sus historias un poco más y, al mismo tiempo, homenajear a todas esas mujeres que nos apasiona viajar por carretera (que no somos pocas ).
Posteriormente, han sido muchas las mujeres que han brillado en el mundo de los viajes por carretera y la automoción, pero sin duda, sin Bertha y Clärenore, esta forma de viajar no hubiese sido posible.
Dos mujeres que han demostrado que un vehículo sirve tanto para ir a ver a la abuela como para darle la vuelta al mundo, que básicamente es lo que nosotros también defendemos, que un coche no solo es para ir a trabajar o hacer la compra, sino que también te da la libertad de ir más allá y descubrir países y continentes.
Por cierto, si conoces alguna mujer más que haya sido crucial en el mundo de los viajes por carretera, no dudes en hacérnoslo saber en los comentarios .
Por muchos más kilómetros de manos de mujeres o en compañía de las mismas, porque son la mejor gasolina para el motor del mundo.
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