Hoy queremos sincerarnos contigo... queremos contarte que nos encanta viajar (bueno, eso ya lo sabéis), pero que nos gusta más viajar en coche (vale, eso también lo sabéis), pero también nos gusta viajar en avión, aunque hay cosas que nos molestan de los vuelos
Hacer un viaje largo en avión puede ser lo más cómodo del mundo, pero también puede ser un infierno... y tenemos pruebas de ello.
Por eso, queremos contarte a continuación 5 cosas que nos molestan a la hora de viajar en avión.
Si quieres enterarte, sigue leyendo, seguro que te has visto en alguna de estas situaciones en algún momento.
1. Pasa, embarca, no tengas miedo.
Y es que llegar antes al aeropuerto siempre es un estrés.
Sí, sabemos que es para facilitar el paso de controles y la facturación del equipaje... pero es que esto supone que, una vez dentro de la zona de embarque, tienes que esperar otro tanto.
Y, claro, ¿qué es lo mejor que se puede hacer mientras esperas? pues pasear por el Duty Free y, como siempre, caer en comprar algo que no necesitas... pero ¿quién puede resistirse a unas chocolatinas antes de embarcar?
Sin saber cómo, llegar al aeropuerto con mucho tiempo de antelación se convierte en un gasto que no tenías previsto.
Aunque otra alternativa es buscar un enchufe para cargar el móvil y esperar a que pasen las interminables horas... y eso contando con que el avión despegue a tiempo.
2. ¡Demasiados modelitos!
A la hora de viajar en avión tienes que tener muy claro qué llevar en la maleta.
Es uno de los principales inconvenientes que nosotros vemos a la hora de volar... la restricción del peso del equipaje.
Porque, ¿quién decide cuánto peso se puede llevar en una maleta? ¿en base a qué lo calcula?
Está claro que en base al peso que puede llevar el avión, dejando a un lado los modelitos que quieres llevarte para salir ideal en las fotos.
Pero esto cambia si pagas... entonces ya no depende del peso que pueda llevar el avión y la cosa cambia.
Esto se traduce en que el exceso de equipaje deja de serlo cuando lo pagas, entonces ya no excedes el peso permitido... ¡curioso!
3. Vocabulario aéreo que puede alterar tus planes
Es oír los términos de overbooking, retraso, vuelo cancelado, huelga aérea, pérdida del vuelo de conexión... y en tu mente aparece la frase de ¿qué puedo hacer en estos casos?
Y es que nunca te lo planteas si no te ha pasado alguna vez... aunque hay que decir que cada vez está más a la orden del día.
Los pasajeros aceptamos que por comprar un billete más económico (y ya no nos referimos a billetes low-cost), tenemos que conformarnos con que las compañías aéreas hagan y deshagan a su antojo.
Pues nada más lejos de la realidad.
Tú, como pasajero, tienes derecho a reclamar a la compañía aérea en cualquiera de los casos anteriores. Eso sí, te lo pondrán difícil para que desistas.
La solución puede ser recurrir a alguna de estas empresas que se comprometen a recuperar tu indemnización a cambio de un porcentaje y, si no lo consiguen, no cobran nada.
Mejor que quedarse de brazos cruzados será recuperar una parte de tu indemnización, ¿no?
Si te ha pasado alguna vez y no conocías la existencia de estas compañías que defienden los derechos de los pasajeros de vuelos, te recomendamos que les eches un ojo.
4. ¡Vamos a morir todos!
Sí... eso ya lo sabíamos, aquí no nos vamos a quedar nadie, el problema es que esto es lo que gritó una señora que estaba en nuestro avión cuando volamos a Chile en medio del silencio de la noche, cuando la mayoría de los pasajeros dormíamos.
La verdad es que no es nada agradable.
Estás durmiendo y, de pronto, oyes una voz que grita esto, te despiertas y te das cuenta de que estás en plena zona de turbulencias... no mola nada
Y es que las turbulencias en los aviones despierta lo peor de los viajeros con miedo a volar y se descontrolan jajaja
Por tanto, nos molesta esos viajeros con miedo a volar que se dan la libertad de expresar sus miedos a pleno pulmón en mitad de la noche mientras el avión atraviesa una zona complicada.
5. En busca del equipaje perdido
Tal cual, como la vieja en el muelle de San Blas, es la cara que se te queda mirando la cinta de equipaje esperando que salga tu maleta... pero esta no llega nunca.
Ahora te toca ir al mostrador, explicar lo que llevabas en la maleta, contar dónde vas a estar próximamente para que te lleven el equipaje al hotel, y cruzar los dedos.
Para esto siempre recomendamos a nuestros amigos a la hora de viajar que metan, al menos, un par de mudas en el equipaje de mano, esto te ahorrará tener que ir de compras urgentemente para poder cambiarte de ropa.
Da gracias si te llega la maleta pronto.
El problema llega cuando estás de ruta y no vas a quedarte en el lugar donde has aterrizado... cambio de planes absolutos Un rollo, vamos.
Pues hasta aquí lo que no nos gusta de viajar en avión... por otro lado, menos mal que tiene muchas ventajas que contrarrestan estos detalles, porque si no... no compensaría.
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